jueves, 5 de noviembre de 2015

PARA LEER Y REFLEXIONAR


Universidades

 Por E. Raúl Zaffaroni
Nunca fue tan claro como en este siglo XXI que saber es poder, algo que las elites siempre supieron. En la Argentina nunca tuvimos aristocracia y hoy ni siquiera tenemos oligarquía, sino sólo una aspiración elitista de alguna riqueza concentrada que sintetiza su pensamiento bajo el lema de no avivar giles.
La polarización del siglo XX está sepultada en el pasado y lo que se discute hoy en el mundo es inclusión o exclusión o, en otras palabras, progreso o regresión en la realización de los derechos humanos. Por obvia que sea la fórmula todo ser humano es persona, lo que se discute mundialmente es si avanzamos o retrocedemos en su realización.
Como en nuestro país y en los últimos doce años se están avivando demasiados giles, es verdad que eso es peligroso para el proyecto transnacional de sociedad excluyente.
Cuantos más habitantes sepan y aprendan algo, más instrumentos tendrán para obtener sus derechos, cuando ya no hay zares ni palacios de invierno para tomar, porque el único palacio de invierno de nuestro tiempo es el saber.
Las distancias entre las naciones como entre las capas sociales internas, no las determina sólo la riqueza, sino que se marcan con discriminación en el saber, en la tecnología y en el know how.
Para nuestros propulsores locales del modelo de sociedad excluyente (30 por ciento incluidos, 70 por ciento excluidos), las universidades del conurbano bonaerense y las creadas en las provincias, son peligrosas fuentes de conciencia ciudadana y de reparto del know how.
Al modelo de sociedad excluyente se le impone contener la expansión del saber, para frenar la reproducción de potenciales propulsores de la inclusión social.
Es comprensible que desde el modelo excluyente se quejen de la existencia de demasiadas universidades públicas y gratuitas y las consideren un gasto inútil, aunque si fuesen más sinceros, tendrían que considerarlas un gasto perjudicial, porque son eso para su proyecto de exclusión.
Los argentinos disfrazados de aristócratas siempre resistieron la ampliación del acceso a la universidad, que desde la Reforma Universitaria de 1918 hasta el presente avanza enfrentando sus aspiraciones elitistas.
Es natural que se pongan muy nerviosos al constatar que el 90 por ciento del estudiantado del conurbano es una primera generación de universitarios, que gran parte proviene de hogares humildes, que recorren calles de tierra, que trabajan.
Siempre les molestó la gratuidad de la enseñanza universitaria. Cabe recordar la fugaz gestión de López Murphy en 2001, aunque hoy ese discurso se oculte por poco táctico.
Pero el acceso a la universidad no se garantiza sólo con que la universidad no cobre aranceles, porque es igualmente inaccesible si el estudiante debe pagar transporte, libros y materiales, viajar dos, tres o más horas y también trabajar. Menos aún es accesible para quien en alguna provincia, directamente deba mudarse a otra ciudad.
El no pago de aranceles es necesario para el acceso a la universidad, pero en modo alguno suficiente. Las universidades del conurbano y las nuevas nacionales en provincias, están llevando la enseñanza universitaria hasta donde nunca había llegado: el barrio, la propia ciudad, el municipio.
¡Demasiadas facilidades! ¡Lo gratuito no se valora! ¡Sólo se valora lo que se obtiene con sacrificio! No lo dicen en voz alta nuestros aspirantes a elitistas, pero lo piensan y susurran en la intimidad confidencial favorecida por algunos rubios champanes.
Herbert Spencer, el ideólogo racista del liberalismo económico del imperialismo británico del siglo XIX, decía lo mismo: la enseñanza no debe ser gratuita, porque no se valora y aprenden a leer libros socialistas. Su discurso fue acogido en su tiempo por todas las oligarquías de nuestra región.
¿Sacrificio? Estudiar requiere un esfuerzo que debe exigirse, pero el sacrificio jamás puede exigirse. Los que se sacrifican son meritorios, se los considera héroes y hasta se los eleva a los altares, pero ninguna sociedad puede exigir sacrificios, y menos para capacitarse. ¿O es que los pobres deben ser héroes para aprender y los ricos no?
Lo que alarma a nuestros procónsules del modelo transnacional de sociedad excluyente es, justamente, que estudiar vaya dejando de ser un sacrificio para los sectores subordinados, y tengan el mismo acceso a la formación universitaria que los segmentos acomodados. Con las nuevas universidades sólo se tiende a exigir paridad de esfuerzo, y por eso tienen miedo, no sea que los otros se esfuercen más.
Si nuestras aspirantes a elitistas realmente quisiesen el desarrollo y la afluencia de capital productivo, si en serio pensasen en la industrialización, no considerarían inútil el gasto en universidades, porque el capital productivo requiere elemento humano técnico, bien preparado. Las universidades son una inversión para el desarrollo industrial, pero ellos prefieren abrir la importación.
Aducen nuestros vernáculos imitadores de elites lejanas que hay un despilfarro, porque hay deserción universitaria. Mienten mucho al respecto, pero además, si la hubiera, tampoco sería un gasto inútil. Quienes deserten, de alguna manera llegaron a la universidad y, aunque no egresen como profesionales, serán mañana trabajadores, o también dirigentes, sindicalistas, políticos o empresarios. ¿Será acaso un gasto inútil que hayan pasado por alguna universidad? ¿No será útil que en la actividad que emprendan sepan algo más?
Otra cosa que les preocupa es el nivel, aunque nunca hayan manifestado la misma preocupación por el de las universidades privadas.
Pero al margen de eso surgen otras dudas. ¿Acaso no saben que no hay país en el mundo, por poderoso que sea, que no tenga más que un escasísimo número de excelencias creativas en cada rama del saber, y que los otros docentes universitarios son repetidores más o menos informados? ¿No saben que las pocas cúspides científicas que cada país tiene se reparten y las universidades se especializan?
¿No será que en vez de discutir una cuestión de nivel académico, están discutiendo un modelo de universidad? Si lo que pretenden es una universidad de altísimo nivel, que concentre las excelencias, para que en ella se forme el think tank de una minoría hegemónica, tienen razón, porque ese no es el modelo de universidad pública y gratuita que requiere una democracia.
Por otra parte, parece que también ignoran que buena parte de los científicos y pensadores del mundo que revolucionaron su saber, trabajaron en universidades pequeñas y provincianas, mientras no pocas veces los catedráticos de las grandes universidades les ofrecieron resistencia, en defensa retrógrada del saber oficializado.
Pero además de todo lo dicho, es menester advertir que no estamos solos en este mundo polarizado entre modelos de sociedad incluyente y excluyente y, por ende, los modelos de universidad deben enmarcarse en esa contraposición.
En la carrera de derecho, por ejemplo, la reducción de los estudios del primer ciclo universitario a cuatro años, acordada en el famoso Plan Bolonia europeo, elimina todas las asignaturas que hacen a la formación histórica, sociológica, filosófica y cultural, para producir solamente abogados tramitadores.
Si bien los dos ciclos siguientes habrán de producir a los juristas, éstos serán los menos y, al fin, su trabajo consistirá en reproducir tramitadores. Centrados en esta tarea, es lógico pensar que sus elaboraciones serán cada vez más pobres y mucho menos críticas, limitadas a visiones parciales, tecnocráticas y funcionales a las corporaciones oligopólicas que se disputarán los servicios de los mejores tramitadores. Por ende, la subestimación de nuestras universidades públicas y gratuitas no es una creación intelectual de nuestros aspirantes a elitistas, cuya inventiva sólo les alcanza para copiar discursos ajenos, sino ecos de peligrosas tendencias transnacionales.
La Argentina debe optar en pocas semanas entre dos proyectos: progresión o regresión, inclusión o exclusión social. ¿Preferimos la aspiración elitista fomentada por nuestros medios monopólicos entramados con el capital financiero transnacional, o aspiramos a una sociedad con base total de ciudadanía real?
La crítica a la ampliación de la universidad pública y gratuita proviene de la aspiración excluyente.
Estemos atentos a los cambios: si muchas veces la consigna fue la defensa de la universidad pública y gratuita, en esta opción no basta con eso, sino que se trata de defender también la igualdad real en el derecho de acceso al saber, como reafirmación de la democracia. La universidad de una sociedad incluyente debe ser pública, realmente gratuita y, por ende, democrática. Seamos conscientes de que en nuestro tiempo la revolución se hace mediante la toma del saber.

jueves, 19 de marzo de 2015

GERENTE BANCO SUPERVIELLE CERO SOLIDARIA

Deseo quejarme po la FALTA DE HUMANIDAD de la Gerente del Banco Supervielle sucursal Medrano y Diaz Velez.
Mi madre cobra su jubilación y pensión allí desde siempre, ha tenido plazos fijos peros por su salud muy deteriorada se ha quedado sin otros recurso que su jubilación. Vive a dos (SI DOS CUADRAS) CUADRAS EXACTAS Acuña de Figueroa 296 3ro A y desde hace tres meses está con oxigenoterapia e internación domiciliaria. Yo soy apoderado de la jubilación (lo era también de mi padre) pero al morirmi padre pasó a recibir la pensión a la misma caja (por pedido nuestro ya que siempre el Banco fue muy eficiente en todos sus trámites al menos bajo otras gerencias). Como no soy apoderado de la pensión cada tres meses llevaba a mi madre en silla de ruedas a firmar la supervivencia pero al agravarse no puedo hacerlo ya que hay falta de mochilas de oxígeno y no puedo trasladar un tubo de un metro setenta. Hoy fui con un certificado médico e historia clínica pidiendo por favor se me permitiera llevar los recibos para firmar o me acompañara un empleado del banco los docientos metros para que en su presencia mi madre firmara (hoy había muy poca gente) y con total frialdad la gerenta se negó al procedimiento y ni siquiera se dignó a atenderme. Yo soy bioquímico hago guardias, y trabajo 14 horas por día, me es muy complicado ir al ANSES a regularizar esto. Me veo obligado a trasladar mi madre en ambulancia por dos cuadras para cumplir con la falta de voluntad y humanidad de una persona que a mi parecer no cumple con los requicitos de sensibilidad y solidaridad que suelen tener tener (al menos hasta antes de esta persona) los Gerentes de tan prestigioso Banco. Se que actuó bajo las normas legales pero CERO SENSIBILIDAD sobre todo que hoy a las 10 había muy poca gente.
Con todo mi respeto,

Sergio Luis Kohan

domingo, 15 de febrero de 2015

ESTA ES MI PROPUESTA

LA TIERRA ES PARA EL QUE LA TRABAJA:
El Estado debe comprar la tierra ociosa y distribuirla en cooperativas de trabajo administradas (o controladas) por el mismo Estado asegurando la compra de los producido con un seguro por desastres naturales.
EDUCACION PUBLICA GRATUITA Y DE CALIDAD:
El Estado debe tutelar la Educación fijando los mas altos estándares pero al mismo tiempo asegurando el libre acceso al conocimiento segun limitaciones propias. Salarios acordes (decentes) a los docentes estimulando y recompensando las permanentes capacitaciones de los mismos. El CBC no debe ser un filtro o barrera para la Universidad. Debe ser un elemento de inclusión y estímulo para las distintas carreras. Se deben crear y fomentar nuevas carreras acorde a la época que actualmente sólo ofrecen instituciones privadas.
SALUD PUBLICA Y GRATUITA:
Se debe promover el acondicionamiento de TODOS los institutos de Salud con las últimas tecnologías y con el mejor personal posible. Los cargos deben ser full-time y muy bien remunerados. Auditar las LICITACIONES para evitar los sobreprecios y las coimas. Controlar el manejo de los recursos y evitar el uso de ellos para beneficios propios (que los Bioquímicos no usufructen el laboratorio para hacer negocios propios, al igual que los farmacéutico ni los médicos se roben los pacientes para sus consultorios particulares). Crear un Sistema Nacional Integrado de Salud como el propuesto por el Dr. Liotta en 1973 actualizado a la época. El salario de los profesionales de la salud debe estar acorde a sus estudios y dedicación.
TRANSPORTE PUBLICO REGENTEADO POR EL ESTADO:
El transporte público debe ser regenteado por el Estado (qué diferencia hay si ahora ya lo está subvencionando) poniendo especial dedicación a la seguridad, confort y frecuencia de los móviles. Choferes con salarios dignos y acordes.
Estimular y mejorar TODOS los medios de transporte.
ENERGIA Y AGUA EN MANOS DEL ESTADO:
La Energía y administración de los recursos hídricos es un BIEN PUBLICO y estratégico. NO PUEDE ESTAR EN MANOS PRIVADAS Y MENOS EXTRANJERAS. El Estado debe regentear y controlar estos recursos com mayoría en TODO tipo de sociedad. Promover otras fuentes de Energía no tradicionales (solar, aeólica).
BANCA NACIONAL (AUNQUE LE DUELA A MUCHOS):
La Banca debe estar nacionalizada (auditada). Puede haber Bancos privados de capitales argentinos de distintas ONG (Sindicatos también, por qué no?). Es la única forma de terminar con la especulación financiera. Permitir a la banca extranjera tener representaciones para intermediar negocios con el exterior pero NO ingerencia en la actividad nacional.
VIVIENDA:
Fomentar y estimular (con proyectos del Estado) la creación de vivienda no sólo para compra sino también para alquilar. Donde el alquiler no pueda superar el 30% de los ingresos (debe ser acorde al tamaño de la familia) y de ser necesario subvencionar la diferencia.
Crear urbanizaciones periféricas (tipo Ciudad Evita) que puedan funcionar autónomamente pero de rápido acceso a las grandes urbes donde se desarrollan las actividades de los habitantes de esas ciudades.
SEGURIDAD:
Fomentar el desarrollo académico de los componentes de las distintas fuerzas de seguridad fomentando el conocimiento de todos los integrantes de las distintas fuerzas (fundamental Policía) y con sueldos acordes y dignos.
JUSTICIA:
INDEPENDIENTE pero NO VITALICIA.
IMPUESTO A LAS GANANCIAS:
TODOS SIN EXCEPCION PAGAMOS IMPUESTO A LAS GANANCIAS PERO ACORDES A LOS INGRESOS (SIN EXCEPCION). ESTE VOLVERA EN OBRAS (PERO DEBERA VOLVER SI O SI).


Esto es un resumen de mi idea. NO ANULO LA ACTIVIDAD PRIVADA. Pero debe estar regulada.
ELIJO COMO MODELO EL DE NORUEGA (ANTES DE CRITICAR LEAN COMO ES EL MODELO, PUEDEN VER UN RESUMEN EN EL INFORME KLIKSBERG DE CANAL ENCUENTRO CUANDO SE REFIERE A NORUEGA)

OBVIAMENTE PARA TODO ESTO SE NECESITA HONESTIDAD Y SOLIDARIDAD

POR ULTIMO LOS FUNCIONARIOS PUBLICOS Y LEGISLADORES DEBEN ENVIAR SUS HIJOS A ESCUELAS PUBLICAS Y UTILIZAR HOSPITALES PUBLICOS.

CUANDO EJERCEN LA FUNCION (LEGISLADORES) deben mantener el salario que tenían antes de ocupar la misma

lunes, 9 de septiembre de 2013

NOS MATARON A KEVIN



 

Sólo nueve años,
Nueve sólo nueve.
Una bala perdida,
Un tiroteo mas.
No es sólo un pibe mas.
Es un pibe menos
Entre los miles
Y millones
Que no llegarán.
No es en Siria,
Ni Afganistán,
Ni en el Sahara.
Fue en Zavaleta.
Escondido,
Temeroso de este
Mundo de mierda.
Escondiéndose del peligro.
Pero el peligro fue hacia él.
Kevin y sus nueve años de vida,
Sólo nueve años.
No existen las balas perdidas
Cuando las fuerzas de inseguridad
Miran hacia otro lado.
Hoy no me hablen de justicia.
Hoy no me hablen.
Hoy no.
Hoy es otro día mas de mierda
y de injusticia
Para los que nunca HABRÁ JUSTICIA.
Los perdidos de esta Argentina oculta.
KEVIN,
Nueve años.

miércoles, 28 de agosto de 2013

CERDOS Y PECES POLITICOS

 

Todos son perros políticos
Cerdos y peces políticos
Y la basura es política
todos son sueños políticos
y la enseñanza es política
Y me despierto en un vómito
todos son vómitos políticos
Y la esperanza es política
y me atormento en un cerdo
Y es un cerdo político
Y me transformo en mil peces
y ellos son peces políticos
Y ya me ahogo en el fango
Y es el barro político
y me reviento el cerebro
Es un cerebro político
Ya no me duermo con nada
Sin esperanza política


domingo, 5 de agosto de 2012

VICTOR HUGO MORALES,YO CREO EN EL

In Gold we trust/ Esta frase que es un himno de ciertos grupos empresarios con los cuales te has enfrentado (perdón por tutearte) debería encabezar la primera plana de algunos medios (Clarín, Nación, Perfil) entre otros. En realidad yo creo que estos grupos no creen en nadie más que en sí mismos y lo que hoy los une, "la comunión de intereses espúreos", mañana puede enfrentarlos. Tengo 57 años y en mis veinti tantos, me despertaba con radio Belgrano y Aliverti junto a ese joven colaborador, prometedor de un periodismo nuevo y valiente llamado Jorge Lanata. Si Frondizi fue comunista en su juventud y todos sabemos en que extremo terminó, a pesar de haber sufrido en carne propia la ejecución miserable y traicionera de su hermano (¿fue quizás esto un shot tan grande que le lavó el cerebro?, o un a variante rebuscada de un sindrome de Estocolmo que le produjo terminar cuasi aliado de las ideas que terminaron con una vida tan preciada y valiosa para la humanidad). ¿Y qué fue lo que transformó al Lanata de los ochenta en el Lanata del 2012? Creo que su inmenso EGO lo secuestró y se apoderó de su mente transformándolo en esto que hoy pasea por los pasillos de Burundandia, ese país que dominan los medios monopólicos y donde la moneda de cambio es la obsecuencia, sumisión y degradación de todos los valores no contables y acumulables en especias. Hay gente que no puede con su ego, gente muy pequeña, muy débil, a pesar de que en algunos momentos pudieran parecer valiente y heroicos. Víctor Hugo, qué nombre notable y parafraseando a tu homónimo «La cuestión social sigue en pie. Es terrible, pero simple, ¡es la cuestión de los que tienen y los que no tienen!», te estás enfrentando a "los que mucho tienen" en una lucha desigual. Podrás perder en esta tierra y en esta época, pero tu lucha ganará en los tiempos como lo han hecho los grandes luchadores que utilizaban cómo principal arma la honestidad y la verdad. Recibe el apoyo de este humilde ciudadano que cree en vos y en tus convicciones. Un abrazo, Sergio Kohan

miércoles, 18 de julio de 2012

PAJAROS SIN LUZ

Pájaros sin luz Por Claudia Rafael Martes, 17 de Julio de 2012 09:45 Enrique-Carrasco-sj-12(APe).- Berreó sin más en el torno. Tocaron la campanilla. Desde el interior, un empleado gris y aséptico hizo lo que era costumbre: mover el armazón giratorio de madera y apareció él. A alguien se le ocurrió llamarlo Manuel Juan, el sin apellido. El niño puesto afuera. Desde el anonimato más profundo. Ex-positus. Así de simple. Compartiendo identidad con cientos, con miles que año tras año pasaron por esa vieja casona. Manuel protagonizó una fuga tras otra. Vio morir a tantos iguales a él. Escapó de la familia sustituta que le impusieron. Y creció. Y creció. Y escapó. Y trabajó en una panadería, en el ferry, fue aprendiz de pastelero. Y se hizo poeta. Y más tarde director de teatro. Y entre medio, anarquista y soñador. Parió dos bellos hijos junto a “Lucha” como se la conocía a Rafaela del Giúdice Cafaro. Que le cantarían después toda mi vida es el ayer que me detiene en el pasado, eterna y vieja juventud que me ha dejado acobardado como un pájaro sin luz. *** A.D tiene 13 años. Sigue perdido. Anónimo. A los ocho se fue por primera vez y lo encontraron nueve meses más tarde. Hundido -como tantas veces estaría en el futuro- en las drogas que lo sacaban por segundos, por minutos a veces, del cepo de una vida de ferocidades. “No sabía lo que era la droga hasta que me explicaron lo que le había pasado a mi hijo. Pero la verdad es que no lo podía entender. Desde ese momento empecé a pedir ayuda para que fuera asistido, tanto en el juzgado como en la comisaría, pero nunca nadie me brindó una solución”, denuncia Romina, la mamá. “Por momentos es dulce, me abraza y me pide que no lo deje solo. Después se vuelve agresivo con sus hermanos y regresa a la calle”, relata la mujer. Entró y salió de las estructuras del Estado miles de veces. “Lo encontraban en la calle con sobredosis de drogas y hasta desnudo. Tengo miedo de que un día aparezca muerto o lastime a alguien”, le contó Romina a Julián Axat, defensor oficial de La Plata. La última de tantas internaciones lo encontraron aislado y con mucho frío en una habitación de Ferromed, una clínica del gremio ferroviario en Junín. Silvio Echarri, defensor oficial de esa ciudad, contó que estaba en “una habitación de aislamiento, sin poder salir de allí excepto para recibir la alimentación junto a otros jóvenes alojados, sin contar con baño propio y pasando mucho frío por las noches, solicitando se lo traslade a las habitaciones junto con los otros chicos (…) Se trata de un lugar en pésimas condiciones de habitabilidad, limpieza o higiene, iluminación, calefacción y ventilación, sin baño propio, y lugar adecuado para descansar. Dado el actual período invernal, no cuenta con calefacción, es más, en la parte superior de la pared que da hacia el exterior posee un ventiluz totalmente abierto, sin vidrio o cerramiento alguno...” El Estado presente hasta la médula está terminando de forjar a A.D. De doblegarlo ante esa indómita libertad de la calle en la que las drogas lo buscan, lo seducen, lo interpelan todo el tiempo. El Estado sigue presente en A.D. Lo trasladaron a la sala de infectología del Hospital de Niños de La Plata del que “A.D. hizo abandono de tratamiento unilateral, de ninguna manera se puede hablar de una fuga ni mucho menos de abandono de persona”, se defendió la Secretaría de Niñez desde un discurso falaz y en las antípodas de la ternura y el abrigo. A.D. sigue perdido. Hundido en las brumas del sistema. Ensombrecido y muerto de miedo. *** “Juan es una fotografía de la injusticia social (y su distribución inequitativa), de la injusticia procesal penal (de los hechos y actos que nunca se investigaron y que jamás se investigarán), de la injusticia penal (y de la perinola con la que condena) y de la corresponsabilidad estatal en cada una de estas injusticias. Si Juan fuera un asesino, a ese asesino lo criamos nosotros en el Hogar Sarciat, se lo sacamos a los padres porque nosotros lo íbamos a criar mejor. De la corresponsabilidad del Estado en estos ´productos´, nadie habla y nadie se hace cargo de eso a la hora de juzgar y condenar”, dijo la trabajadora social. Juan conoció las calles de Olavarría como nadie. El barro. El abandono. La carga de aprender a sobrevivir como fuera, él y sus hermanos más chicos. El Estado se hizo cargo. Dijo cobijarlo. Abrazarlo. Darle valores. Salvarlo y regenerarlo. El Estado prefiguró –dicen Julio Ríos y Ana María Talak- esa “alternativa altruista que lo mantuviera alejado del `exterior`”. Juan fue condenado a perpetua por un crimen que quizás cometió; tal vez, no, pero en donde el Estado no puede gritar a los cuatro vientos inocencia alguna. El Estado fue crucial en la historia de Juan. Como en la de A.D. Como en la de Manuel Juan. “Las condiciones económicas tienen sobre las morales una influencia determinante en sumo grado y así en las familias pobres, donde la fecundidad parece estar en razón inversa a los recursos, la educación de un crecido número de hijos se dificulta en forma tal que el abandono de los menores resulta un hecho dolorosamente lógico”, describía con patetismo el historiador Vicente Sierra. El mismo teórico que escribió que las familias en las que los niños que terminaron derivados a reformatorios u orfanatos constituían “un foco de delincuencia” que ante “la falta de dirección moral” terminaba pervirtiendo “al menor”. *** Manuel Juan se apellidó Expósito, como tantos niños crecidos en esa vieja casona. Huir una y otra vez del Estado y de las herencias que le cargó el Estado le terminó salvando su vida, construida entre las semillas de utopía. Esos dos bellos muchachos poetas que trajo a la vida junto a su “Lucha”, Virgilio y Homero, heredaron ese apellido surgido del abandono y escribieron con escasos 17 y 20 años cómo en esa calle de estío, calle perdida, dejó un pedazo de vida y se marchó... *** El 14 de julio de 1779 el virrey Juan José de Vertiz y Salcedo firmó la creación de la Casa de Niños Expósitos. Cientos y cientos de mujeres fueron violadas por alguno de los 9000 soldados enviados por Carlos III a custodiar una Buenos Aires de apenas 28.000 habitantes. Huérfanos y expósitos eran abandonados sistemáticamente en el torno desde el anonimato más profundo. Bastardos e ilegítimos. Unos y otros crecían bajo “la norma” de las estructuras de beneficencia. La institucionalización de la infancia se fue perfeccionando ferozmente según los tiempos. “Filogenéticamente consideradas las tendencias criminosas le son naturales como eran naturales en el hombre primitivo. El niño no nace un dechado de bondades, por el contrario, la germinación delictuosa es mucho más activa y variada que en el adulto”, escribió Víctor Mercante en sus notas sobre criminología infantil (1902). En estos tiempos de diferenciarse fuertemente de la filosofía del patronato, las contradicciones saltan a la luz. Desnudan cómo A.D. visitó una, dos, diez veces instituciones variadas de la sociedad actual sin que ninguna logre mirarlo a los ojos como el cachorro humano que es. Desnudan cómo Juan aprendió el costado más duro de la humanidad y reaccionó ante él. Desnudan cómo se torna imprescindible acorralar a esa infancia indómita o vencida. Cercarla en los barrios y dejarla inerme ante un presente de ferocidades. Humillarla y arrinconarla. Quitarle alas. Convertirla cruelmente en ni-ni. “El país que olvida a la niñez y que no busca solucionar sus necesidades, lo que hace es renunciar al porvenir”, dijo Eva Perón el 1 de agosto de 1948. “En un país lleno de riquezas, en un país de hombres que se llenaban la boca con las palabras más sonoras, barajando los conceptos de justicia, solidaridad, patriotismo, fraternidad y ayuda… allí estaban los necesitados, olvidados y escarnecidos, esperando inútilmente que los señores de la política quisieran preocuparse por los que tenían que fundamentar el porvenir de la Nación”. Foto: Enrique Carrasco SJ Edición: 2260 Unite a APe